En nuestra Casa Salesiana de Concepción, el Día del Educador se vivió con alegría y gratitud desde el inicio de la jornada. Los tradicionales buenos días tuvieron un toque especial, con música resonando en cada rincón del colegio, creando un ambiente festivo y lleno de agradecimientos. Los estudiantes, con sus corazones llenos de gratitud, aprovecharon la oportunidad para expresar sus más sinceros saludos a los educadores, reconociendo todo el esfuerzo y dedicación que estos ponen día a día para acompañarlos en su formación.
La celebración continuó en las salas de clases, donde los estudiantes compartieron junto a sus educadores un desayuno especial, preparado por cada curso. Las aulas se llenaron de risas, anécdotas y momentos de convivencia que reforzaron los lazos entre profesores y estudiantes, resaltando el valor del acompañamiento y el cariño que existe en nuestra comunidad.
Este día fue una oportunidad para celebrar la vocación educativa de cada uno de nuestros docentes, quienes con su entrega diaria ayudan a formar personas íntegras y comprometidas con los valores salesianos. La comunidad agradece profundamente el papel fundamental que los educadores juegan en la vida de nuestros estudiantes, siendo guías y referentes que siembran semillas de esperanza y conocimiento.